UN REGALO SORPRESA.
Cuando nació era una enorme bola de pelos blancos que parecía un copo de nieve, a los días de nacido y después de alimentarse de su mama el señor Chamin lo tomo en sus manos, lo puso dentro de una cajita de zapatos y lo llevo a casa de su gran amigo Gustavo, si que eran viejos amigos y se reunían a menudo a jugar golf y algunos otras tardes simplemente a platicar largas horas saboreando un buen vino. Gustavo al ver llegar a Chamin descubrió que traía algo en sus manos y pregunto ¿Qué escondes en esa caja? Porq no creo que me traigas unos zapatos ¿verdad? Jajaja sonrió chamin y respondió no, no son un par de zapatos, jamás te regalaría unos pues te conozco y se que eres muy especial para tus gustos jajaja. Pero lo que si traigo y no hagas alboroto, es un lindo gato que quiero regalarle a tu pequeña hija mariella. Oh! Respondió Gustavo y en complicidad le dijo: pongámoslo en su cama ahorita que esta en la cocina y no se dara cuenta, seguro se sorprenderá al verlo. Ambos pusieron en marcha su plan y colocaron la caja sobre la cama de mariella, claro esto después de varios intentos por ponerla de una u otra forma para ver como se vería mejor, la verdad es que ninguno de los dos era muy ducho para dejar detalles, así que el simple hecho de dejar esa caja en cualquier posición era ya un gran logro. La pequeña mariella termino de almorzar y subió a su cuarto cuando aun estaban este par de misteriosos amigos que al oír los pasos de la niña por la escalera, salieron corriendo (bueno algo presurosos porque correr a esa edad seria un desafió) como pudieron se metieron al baño justo cuando mariella entraba a su cuarto. Wow!! Parece que alguien dejo esa fea caja de zapatos sobre mi cama. La quitare antes que mi mama venga y me regañe por tener cosas sucias sobre el edredón limpio. Al levantar la caja sintió que estaba un poco pesada y que algo se movía dentro. Quito la tapa y exclamo ¡oh ¡ ¿Qué es esto? ¿Tu quien eres y quien te puso dentro? En el baño un par de cabezas se asomaban para no perder la escena mientras se decían…te dije que le pusieras una nota de que era un regalo para ella, si se me olvido ponerle un moño a la caja, mm tal vez la debiste haber forrado con un lindo papel. Bueno ya! Peleaban en voz baja para no ser descubiertos. Mientras tanto mariella saco al gatito entre sus manitas que lo acariciaban suavemente y le dijo…si que estas gordito!! Se ve que eres un tragón!! Y el gatito parecía entender pues su carita hizo una expresión que arranco una mirada de ternura de la pequeña diciendo, eres tan tierno mmm ya se! Te pondré de nombre…a ver eres gordito, tierno, suave, peludito, ah siii te llamare …bola de nieve….ese será tu nombre jajaja siii me gusta bola de nieve..bola de nieve…¡mamá mira lo que me encontré en mi cama! es un gatito y se llama bola de nieve, salio gritando mariella por toda la casa…en el baño los escondidos amigos se veían uno al otro y decían….te has dado cuenta Gustavo? Esa niña no supo que fui yo quien le ha dejado ese regalo…jajajaja rió Gustavo y dijo, pues claro si no le has dejado una nota, como crees que se enteraría que fuiste tu? Además creo que nunca le has regalado nada. Pero ese nombre de bola de nieve, mmmm pensativo continuo, creo q mejor le hubiera puesto…”bola de golf”!! Ese si que es un buen nombre. Ahora ya suéltame chamin que me has tenido abrazado todo este tiempo y vamonos a nuestro juego que ya fueron muchas emociones para una mañana.
DE
EDUARDO PEREZ VALENCIA
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